PURA MAGIA

Siempre he leído mucho, me gusta evadirme de mi vida y meterme en la vida de esos protagonistas que siempre son recordados.

Descubrí la lectura en una época en la que lo estaba pasando muy mal y supongo que gracias a ella, podía dejar de pensar en mis problemas y vivir otras vidas.

Es increíble como unas hojas y unas letras pueden contener tanto: Amor, misterio, terror, guerras, humor, a veces vidas iguales a las nuestras, otras en cambio vidas completamente distintas... En definitiva, historias increíbles.

Cuando veo un libro que no me he leído en una estantería, sólo veo la portada, lo material. En cambio, cuando miro un libro que ya me he leído, consigo ver mucho más allá. Consigo ver una familia triste por la perdida de un ser querido, consigo ver una ciudad antigua, consigo ver un niño cuyo único amigo es un niño que se encuentra tras una valla...

Puedo estar leyendo metida de lleno en la historia sin darme cuenta de lo que sucede a mi alrededor. Cuando despierto de eso, me doy cuenta de lo sumergida que estaba en la historia. Es maravilloso como la mente va recreando todo lo que unas palabras te van ofreciendo. De ahí la decepción al ver una película después de haber leído el libro, ya que normalmente la imagen que nos hacemos de los personajes o de los paisajes es muy diferente a los de la película.

Si digo que desde aquí que os recomiendo que leáis puedo parecer un anuncio de 12 meses 12 causas, o peor aún, puedo recordaros a vuestros profesores del instituto y no me gusta la idea.

Lo único que os puedo decir es que aquello que esconden los libros es... ¡Pura magia!